12 de octubre de 2010

Que gano con tu amistad

 
 
Que gano con tener tu amistad,
si buscaba en ti el amor
el cual guardas con vanidad
y tan solo me causas dolor.

Que gano con tener tu amistad,
sin poder dejar a un lado mis sentimientos,
llenándome de infelicidad,
al ver que no compartes mis pensamientos.

No puedo ser tan solo un amigo,
por más que quiera intentarlo,
pues has vivido muchos momentos conmigo,
lo que no es fácil olvidarlo.

Que tonta decisión.
de nuestro amor terminar,
tirar a la basura nuestra relación,
por el temor de quererte casar.

Bueno en realidad,
no sé qué te está pasando,
te estás llenando de vacuidad
y cualquier pretexto estas buscando.

No creas que voy a insistir,
porque de eso ya me he cansado,
ya me has hecho sufrir,
no te importo que de ti estuviese enamorado.

Solo recuerda que en nuestro corazón,
compartimos un sentimiento,
que hoy atacas a traición,
con el puñal de desaliento.

Piensa lo que vas a hacer,
no actúes de forma precipitada,
pues con tu absurdo proceder,
mi vida dejas desolada.

No quiero tan solo tu amistad,
pues creí que éramos tal para cual,
pero en tu realidad,
tan solo fui un fulano de tal.





6 comentarios:

María dijo...

A veces en la vida hay situaciones difíciles que sólo la serenidad y el tiepo pueden dejarnos vivir.
Un abrazo.

Ricardo Miñana dijo...

El siguiente paso despues de la amistad es el amor, salvo decepcion, bella poesia.
es un placer leerte.
que tengas una buena semana.
un abrazo.

♥ Sussy* Alvarez dijo...

una cruel amistad!
solo resta desearle felicidad
aunq no sea a nuetro lado... me encanto el poema
besos y abrazos.

Anónimo dijo...

Unas veces se incia con la amistad y otras es el amor y con él, la palabra "amigos" se complementa.
Aunque para ello hay que sentir al unísono.
La luz siempre auguro nuevas oportunidades.
Un beso.

aapayés dijo...

Un poema que encierra mucho.. leerte de verdad es un gustazo..




Un abrazo
Saludos fraternos…

Ángel Saguar dijo...

No quiero tan solo tu amistad,
pues creí que eramos tal para cual,
pero en tu realidad,
tan solo fui un fulano de tal.

Exacta y certera pintas la escozor que acaricia con brasas inapagables el alma...

Un saludo