11 de enero de 2011

DUELE SIEMPRE

 

Para quien
no sepa,
del dolor,
será extraño
comprender,
el dolor perpetuo,
físico, de un año,
en mi cuerpo;
no puedo caminar,
no puedo apoyar
en el piso,
un pie, porque grito de dolor,
tengo que pensar
en cada cosa pequeña,
como ducharme, como
entrar y salir
de la ducha,
como me siento acá
para escribir
-en mi fiel blog-
para que no duela,
pensar, como me voy
a poner en el lecho,
para dormir,
-a veces, no duermo-
como contar los días,
largos, iguales,
como un fin de semana eterno;
no, no creo que lo puedan
comprender,
es muy dañina, esta
discapacidad-dolor-anclado
que ,con la fuerza
enorme,
de mi energía,
he decidido ponerle
fin,
operándome;
es curioso, pero cuando tomé la decisión,
tengo una larga calma interna,
que me está apoyando,
todos los días,
de los demás días,
hasta el momento
final, de salir
de un quirófano
y finalmente
volver a caminar,
y a ser libre,
como la luz,
de la luna
-la madre-
y el sol, que parte
esta tierra
-el padre-
en miles de pedacitos,
cada día mas cruentos;
debo decir,
que la compañía,
el acompañamiento
ESTA, con eso,
me basta y me sobra!

 

1 comentario:

María dijo...

Seguramente, tomar esa decisión es lo más importante que has hecho en tu vida en los últimos años, así que ánimo y fuerza, mi querida amiga, porque compensará y volverás a ser libre.
Un beso y mi cariño.