Lo he descubierto,
es mi placer, descubrir,
y mi sangre está
en llamas,
y mis ojos lumbre son;
mis labios, mi boca,
rezuman calor,
el que me has brindado,
dándome amor;
cuerpo que se estremece,
y las voces, hablan,
sin gritar, pero sin freno:
quererlo es tu destino,
como es dolor también;
no se si mi destino,
no se si mi dolor,
tan solo, se,
que es vida, la dicha,
que siento,
al verme, entre tus brazos,
acunada, por ti!
es mi placer, descubrir,
y mi sangre está
en llamas,
y mis ojos lumbre son;
mis labios, mi boca,
rezuman calor,
el que me has brindado,
dándome amor;
cuerpo que se estremece,
y las voces, hablan,
sin gritar, pero sin freno:
quererlo es tu destino,
como es dolor también;
no se si mi destino,
no se si mi dolor,
tan solo, se,
que es vida, la dicha,
que siento,
al verme, entre tus brazos,
acunada, por ti!
4 comentarios:
Querida Lidia, que bello poema.
La dicha, la felicidad siempre llegan a renovar y llenar de esperanzas nuestra vida.
es un placer leerte querida Lidia, que Dios te bendiga.
gracias por tu cariñosa visita ...es un placer verte por mi casa
un beso
Marina
Disfruto cuando entro a tu espacio y me encuentro con una buena producción poética.
Un abrazo.
Lidia, que poema tan sensual, y lleno de pasión..Me siento yo al verme en sus brazos, trasmite mucho,, me ha llegado...
Un beso de brujilla
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